Mis padres tienen la culpa de que me discriminen. Ya no me invitan a jugar, ya no me eligen como delegado en “El Quemado”, sabiendo que mi derecha es diabólica y ganamos seguro. Los recreos son una tortura, con Ricardo, el otro chico que también es vedado de cualquier actividad social.
No soy demasiado feo como para que me dejen de lado. Ni tan hincha pelotas o tonto como para que me ignoren, mi único problema son mis padres. Su egoísmo. Su falta de consideración por mis relaciones interpersonales, mi niñez, mi complicada adolescencia y mi futuro.
Claro, qué se van a preocupar ellos. Tienen lo que quieren y más y no les importa si no pertenezco a la mayoría, si me excluyen debido a su incapacidad de entender a la sociedad. O sea, todos los otros padres son iguales y hacen lo mismo, por qué los míos no? Tengo que soportar fines de semana en familia cuando podría estar en casa de Julián jugando con la Playstation 3 que le regaló el padre. O la Wii que le dio la madre. No es justo que la mayoría de los chicos que conozco tengan dos habitaciones, dos televisores, dos casas y yo una. No se porque mis padres me hacen esto.
Y yo con mi habitación, mis cosas(que hay solo una de cada) en mi casa con aroma a un no sé que que está en el aire. Se siente como las sonrisas de cuando salimos con mis padres al cine o a los fichines o a jugar a la pelota (Mamá es de madera, pero ataja bien).
Yo los miro y no entiendo como el morocho, caprichoso y excesivamente trabajador del Sur esta con la rubia, soberbia y encantadora del Norte. No cuadra. Los otros padres se parecen. Son de mismo color, posición, barrio, supermercado. No tengo compañeros en el aula que sus padres no hayan compartido la misma góndola de lácteos. O conocen el Eki o Carrefour. Los míos no, ellos están más allá del bien y del mal…. O de Gral. Paz. No es bueno eso, porque por su culpa me miran raro todos. Cuando me ven bajar con ellos del mismo auto (porque, obviamente, los padres de mis compañeros tienen dos) se dan cuenta que de la mezcla de ambos sale un tehuelche tano, encantador y trabajador. No entiendo.
Cuenta la leyenda, que Papá entró a una oficina como cualquier otro día y se encandiló con unos ojos claros impactantes (que no heredé), una sonrisa de McDonalds y un carácter de mierda. Mamá, dicen las Santas Escrituras, que se rindió al encanto de su forma de ser, carisma avasallador y su mirada… que cada tanto se desviaba para abajo. De ahí en mas, casas, autos, animales y/o hijos.
Ellos no se dan cuenta que son bichos raros. O si, y se ríen. De todo y de todos. De mi principalmente cuando, el día de su aniversario de 30 años juntos, les digo:
-Mama, papa, por que no se separan? Todos los padres de mis amigos están separados! Ustedes nunca me dan lo que quiero! Por su culpa me discriminan! Porque ustedes me dan lo que sus padres les quieren comprar a ellos!
USTEDES SON EGOISTAS!
woooww enserio el que desee eso de sus padres
ResponderEliminarno tiene corazon como yoo no desearia ke mis padres estuviesen juntos osea es algoo ke anhelo y nunk se podra cumplir.. ahora los ke tienes a sus padrs juntos aprovechenlos!!!