19 may 2011

El saber no ocupa lugar

Durante años, el pensador Carlos Molinari se había nutrido de tanto conocimiento que va por la vida volcando su sabiduría por cuanto lugar alberga un alma y un oido para escucharlo.
Su alta capacidad de oratoria, analisis y almacenamiento de hechos y protagonistas son legendarios por donde transita. Sus comentarios eran siempre acompañados por una risa cómplice y una afirmación con la cabeza.
Y en medio de sus interminables discursos, al pensador le gusta interactuar con su desprevenido público, lo que la mayoría de las veces provoca que el involuntario receptor de la cátedra diga: "no sé de que carajo me estas hablando".

1 comentario:

Y ahora... que?